Dialogando nos entendemos
Solución de problemas y conflictos
El mundo digital es parte de nuestra cotidianidad, y al ser un espacio en el que se encuentran y expresan miles de personas, es común encontrarnos con desacuerdos y conflictos. Esto se ve reflejado en millones de expresiones, comentarios, videorespuestas e imágenes que se suben todos los días. Si has discutido con otras personas en línea o has quedado en medio de una discusión ¡detente! No vale la pena que gastes tu energía y tiempo en esto. Para que no te desgastes en conflictos innecesarios, tenemos unas recomendaciones que te pueden servir:
Es normal estar en desacuerdo con los demás porque no todos pensamos igual y esto se debe a que cada uno de nosotros es distinto, a que tenemos ideas y creencias diferentes y vivimos en contextos diversos. Por esta razón, es común que surjan diferencias y conflictos, y para resolverlos se requiere que trabajemos en nuestra habilidad de resolución de problemas y manejo de conflictos.
Esta habilidad nos permitirá encontrar formas de solucionar altercados o discusiones en línea, a partir de tu actitud y el control de tus emociones. Dicen por ahí que para pelear se necesitan dos y si tú no te enganchas en una pelea, entonces podrás parar un enfrentamiento que gastará tu energía o te dejará con molestia.
¿Cómo evitar conflictos en línea por medio de mis emociones?
Si utilizas frecuentemente redes sociales como Facebook, Instagram, Twitter, Snapchat y WhatsApp para publicar tus pensamientos, opiniones y emociones, no puedes negar que alguna vez has recibido algún mensaje negativo que te haya molestado muchísimo, ¡tanto que sentiste mucha rabia y respondiste de la peor manera!
La rabia es una reacción que usamos cuando creemos que nos están atacando o afectando nuestra dignidad y la expresamos a través del enojo o la agresión. Cuando sentimos rabia aumenta nuestro ritmo cardíaco y la presión arterial, generando así posibles reacciones agresivas o violentas que se pueden manifestar de diferentes formas, como mecanismos de defensa frente a un ataque. Algunas de estas reacciones son:
- Anular el sentimiento, buscando interrumpir y prohibir cualquier manifestación de rabia.
- Desahogar nuestra rabia en otros, quitándonos así la responsabilidad de nuestras emociones negativas.
- Tragar el sentimiento, depositándolo en nosotros mismos, generando malestares tales como dolores de cabeza, garganta, estómago, insomnio o ganas de no comer, entre otros.
- Ser agresivos y ofender a las personas a nuestro alrededor, diciendo cosas sin pensar por nuestra rabia.
Estas manifestaciones, aunque creas que te funcionan, ¡lo que hacen es retardar y esconder lo que realmente sientes!, evitando que encuentres una verdadera solución al conflicto. Por esto, es importante saber cuándo estás sintiendo rabia, ya que este sentimiento puede hacernos actuar impulsivamente, sin pensar en las opiniones, creencias y necesidades de los otros. Teniendo en cuenta lo anterior, hay otras formas en las que sí podemos enfocar la rabia y estas son:
- ¡Soltar el celular! O apagar el computador si te encuentras en una discusión, es momento de parar. Suelta tu celular, respira y empieza a realizar alguna actividad que te guste mucho y te relaje. Dedícate tiempo a ti mismo, es decir, a leer algo que te gusta, a escuchar música o a caminar, o hacer lo que más te guste.
- Ocuparnos y preocuparnos por aquello que sí necesite tu atención. Desgastarse en una pelea no te aportará mucho. A veces, es mejor parar, dar un paso al costado y retomar el tema cuando estés más tranquilo. Quizás con más calma podrás tratar de resolver la discusión o malentendido.
- Hablar sobre cómo nos sentimos con una persona que sea de tu confianza, también funciona, pues esto nos ayudará a desahogar nuestras tensiones que se generan por las emociones negativas y recibir consejos.
- Relajarte es importante, ejercicios como yoga o meditación o simplemente respirar te pueden hacer sentir mucho mejor.
Cuando no nos dejamos llevar por la rabia aprendemos a manejar nuestras emociones, y al detenernos a pensar sobre los demás, podemos entender que siempre habrá opiniones distintas y que tienes que aprender a tolerar las diferencias con respeto, analizando los distintos puntos de vista para así poder reaccionar con creatividad e imaginación.
Cuéntanos en redes sociales cómo logras mantener la calma cuando algo te molesta. Encuéntranos en:
Dejar un comentario
¿Quieres unirte a la conversación?Siéntete libre de contribuir!